Tres semanas después del papelón que protagonizó en los Martín Fierro 2017, Diego Brancatelli (41) regresó a Intratables (América, a las 21.15) y realizó un descargo. Lo hizo después de fuertes rumores de una supuesta desvinculación del programa y también del canal por una broma que intentó hacer en la televisada premiación pero que de humor no tuvo nada.
“Un chiste que no fue un chiste. Un momento espantoso que pasamos”, aseguró el conductor Santiago del Moro (39), apenas abrió el programa. Y siguió: “Se habrán enterado de la polémica, todo lo que vivimos. Fue un bochorno lo que sentimos todos. Diego ya había pedido sus vacaciones. Entró en vacaciones hasta el día de hoy. Y hoy retoma su posta aquí en el programa”.
¿Qué fue lo que pasó? Intratables fue elegido como Mejor ciclo periodístico de la televisión en 2016. Y cuando subió al escenario a recibir el premio junto a sus compañeros, Brancatelli dijo: “Para cerrar la grieta, traje a la ‘Cristinita’ de la suerte (una muñequita que sacó de una caja), que se la voy a regalar a Jorge Lanata cuando lo vea”. Anteriormente, el panelista había sacado un huevo de la misma caja y se arrepintió antes de hacer algo, aunque advirtió: “Esta noche está bastante tranquila. Y como este fue el año de los huevos… No, mejor no, voy a dejarlo todo como está…”.
Lo que les molestó a Del Moro, sus compañeros de programa y a las autoridades del canal fue que Brancatelli intentó hacer un chiste personal en la entrega de un premio para el ciclo y no sólo para él. “Lo que hizo no tiene que ver con el canal ni con el programa. Nosotros no pensamos así ni queremos que alguien haga eso”, aseguró Liliana Parodi, gerente de Programación de América.
Así las cosas, el periodista realizó un descargo. Tarde, porque justo se había pedido vacaciones. Pero muy tranquilo, un tanto irónico y sin vueltas. “Aproveché estos días para tomar un curso de actuación y de humor porque no me salió bien algo que quise hacer, que intentó ser simpático y conciliatorio, antigrieta”, comenzó.
“Ya es tarde para explicar la idea, para que lo entiendan. Simplemente quiero pedirle disculpas a mis compañeros y a las autoridades del canal. Tal vez en un momento inoportuno hice algo que no debí hacer”, continuó Brancatelli, quien remarcó que lamentó “que no se haya entendido” lo que quiso hacer.
“Me parecía que había tenido una muy buena relación con Jorge Lanata (cuando su colega visitó Intratables). Y la idea era que esa Cristinita él la tenga, ver si se animaba a tenerla en su casa. En algún momento pensé que podía hacer alguna broma con eso en su mano, jugar con eso. El mensaje fue de buena leche, antigrieta. Regalarle algo de Cristina alguien que está en la otra vereda era algo como para cerrar la grieta. No sé si es tan gracioso, pero sí un símbolo. No surtió efecto”, explicó. Y así dio por cerrado el tema.
