Los cruces a veces llegan entre los personajes menos esperados. Parecería que Gregorio Dalbón, abogado de la expresidenta Cristina Kirchner y Diego Brancatelli, periodista abiertamente kirchnerista, no tendrían por qué pelearse y muchísimo menos protagonizar una duelo verbal en televisión. Pero sucedió y el ring fue la mesa de Polémica en el Bar, en América.
El programa arrancó mal. Brancatelli no quiso saludar a Dalbón. Es que el abogado lo había ninguneado a la mañana, en el programa de radio de Pablo Duggan (también en la mesa), tildándolo de poco importante para participar de un utópico programa con Cristina Kirchner de invitada.
Ya con altas temperaturas en el ambiente, el abogado de la expresidenta le recriminó al periodista la famosa pregunta que le hizo a María Eugenia Vidal apenas tres días antes de las elecciones y que le permitió a la gobernadora despacharse largamente y mostrarse más dura y decidida.
“Cuando vos le preguntaste a Vidal y Vidal te contestó, viste que dicen que es Heidi pero ahí parecía una hiena, (…) , después no le repreguntaste y yo dije qué raro que Brancatelli no le haya repreguntado. Me dolió que no le hayas repreguntado”, recriminó Dalbón. Hasta ahí, el periodista ni tuvo tiempo de contestar. Primero saltó en su ayuda Mariano Iúdica y enseguida lo interrumpió Chiche Gelblung, para explicarle al abogado los ritmos del programa y cómo estaba pactado.
Pero Brancatelli no aguantó: “Dudar, dudar de mí, podes dudar de cualquier cosa menos de mi lealtad y ad honorem. No como otros y otras que cuando le ponen el billete son cristinistas pero antes no eran cristinistas. (…) Y te aclaro una cosa porque estoy caliente de verdad…. (…)
“Me la jugué por un montón de gente que no me la tendría que haber jugado. Cuando después tienen que poner el pecho por vos, te mean. Es increíble. Aníbal Fernández, Romano, … todo lo mismo”, se sacó el periodista.
“Lo que decís, no me pertenece”, repetía el abogado.