El hecho ocurrió ayer al mediodía. La víctima, María M. que reside sobre calle Rivadavia y Córdoba, recibió un llamado telefónico en el que una mujer que se hacía pasar por su nieta Ángela le anunció que era inminente la aplicación de un nuevo “corralito” bancario y que si no quería que los billetes que tenía guardados perdieran su valor o quedaran atrapados en alguna cuenta, debía cambiar esos papeles por otros de “nueva denominación” y guardarlos de nuevo debajo del colchón. Alarmada, la anciana mostró interés. Entonces, la falsa nieta le dijo que ella se encargaría, pero que como estaba en el banco en ese momento, mandaría a un contador conocido a buscar toda la plata que ella tenía para “cambiarla” por nueva y devolvérsela.
A los pocos minutos, un joven de unos 25 años, que vestía campera y pantalón marrón y calzaba borceguíes, se presentó en el domicilio de la empresaria y ella le entregó en tres bolsas 120 mil pesos y 10 mil dólares. Fue la última vez que vio a esa persona y a sus ahorros.
Una hora y media después, cuando cayó que había sido un engaño, hizo la denuncia.
Voceros de la Policía volvieron a reiterar a los vecinos que se abstengan de brindar datos o dinero ante este tipo de llamados. Que primero se cercioren si se trata de conocidos o parientes, pues la modalidad del “cuento del tío” o del “nieto” se halla en boga y ha dejado un tendal de damnificados en la provincia.
