Los dirigentes iban entrando uno a uno al restaurante de Puerto Madero. Mientras adentro el menú gastronómico estaba claro -nadie dudaba de que comerían asado- afuera la incertidumbre se mantenía acerca del temario a tratar.
Es que hay una cuestión urgente: decidir con qué formatos se jugarán los torneos de Ascenso a partir de la nueva temporada. Y otra cuestión que se impone en la agenda: saber qué será del futuro de Jorge Sampaoli como entrenador de la Selección.
“Sampaoli tiene contrato, es el técnico”, soltó el presidente de la AFA, Claudio Tapia, en su ingreso al restaurante cuando faltaban 20 minutos para las dos de la tarde.
Antes de gambetear a los periodistas, Chiqui se había tomado un segundo para ir a saludar a un compañero que estaba recolectando residuos en la zona del polo gastronómico de Puerto Madero.
Luego sí, encaró hacia el local y dijo esas pocas palabras, en su primera declaración pública tras la eliminación de Argentina en el Mundial.
En el ágape se encontraron decenas de presidentes de clubes de Primera División y principalmente del Ascenso.
Según trascendió, fueron alrededor de 100 los invitados al almuerzo. Para muchos, se trata de una demostración de fortaleza del pope de la AFA ante sus opositores en un momento delicado. Otra lectura puede referir que Tapia estaría buscando un consenso para efectivizar la decisión de despedir a Sampaoli.
De la boca para afuera, Chiqui optó por ser políticamente correcto y eludió las consultas con el eufemismo del contrato vigente del entrenador nacido en Casilda.