Luego de la reunión que se dio el sábado por la noche y el acuerdo que se alcanzó en la misma, desde su cuenta en Twitter la AFA oficializó la salida de Jorge Sampaoli de la selección Argentina.
El entrenador de Casilda asumió hace poco más de un año la conducción de la Albiceleste y nunca logró plasmar en la cancha una idea de juego: ni la suya ni la que finalmente terminó consensuando con los referentes del equipo.
El equipo se clasificó de manera agónica al Mundial, luego de vencer en la última fecha a Ecuador en la altura. Muchos pensaron que a partir de ahí, Sampaoli iba a poder trabajar con mayor tranquilidad y aprovechar el tiempo con los futbolistas para llegar a Rusia de la mejor manera.
El propio Chiqui Tapia, presidente de la AFA, avisó que este ciclo seguiría más allá de los resultados que se vieran durante el Mundial. Sin embargo, la baja performance del equipo, la mala relación con el plantel y hasta con sus propios colaboradores hicieron que el final del ciclo se anticipara.
Durante la Copa del Mundo, luego de la derrota por 3-0 ante Croacia, se vivió el comienzo del fin. Tras una charla con los referentes y Tapia, Sampaoli entendió que se había quedado sin poder sobre el conjunto nacional. A partir de ese momento, cada decisión que tomó debió ser consensuada con los cabezas del grupo: Javier Mascherano y Lionel Messi.
El triunfo ante Nigeria y el pase a los octavos dio algo de tranquilidad, pero la relación ya estaba rota. Ya luego de la eliminación ante Francia en octavos de final, se terminó de deteriorar la situación. Cada jugador se fue por su lado y Sampaoli quedó en soledad, se volvió en un vuelo junto a dirigentes que lo querían afuera.
Ya en Buenos Aires, sus principales colaboradores presentaron la renuncia al cargo y desde la AFA empezaron a presionar para que el hiciera lo propio. En la primera reunión Sampaoli fue con la idea de aguantar en el cargo y hasta llevó un proyecto a futuro. Sin embargo, con el paso de los días entendió que la historia ya estaba sentenciada y sus abogados comenzaron a negociar su cláusula de salida, que finalmente quedó en una cifra cercana al millón y medio de dólares.