La madre de una de las víctimas denunció que los pequeños de 8,10,11 y 15 años caminaban por las calles de Chubut cuando fueron sorprendidos por un patrullero. Los efectivos los tiraron contra la pared, tocaron sus partes íntimas y cometieron abuso de autoridad.
Los niños se encontraban este sábado en un cumpleaños y les pidieron que vayan al kiosco ubicado a dos cuadras de la vivienda del barrio Roque González, de la ciudad de Puerto Madryn.
En ese momento, un patrullero frenó de golpe, dos efectivos sacaron sus cachiporras, los obligaron a ponerse contra la pared y no les pidieron ni sus nombres. El niño de 11 años se resistió y uno de los agresores lo empujó y “lo levantó en el aire”.
“Les dijimos que no nos hagan nada porque somos menores pero ellos siguieron. Nos revisaron, nos insultaron, gritaron y manosearon nuestras partes íntimas. Estamos asustados”, relató una de las víctimas.
Patricia Castro, la mamá del mayor de los chicos, los encontró en estado de shock y relató que uno de los jóvenes se puso a llorar cuando ingresó a la vivienda.
“Estoy quebrada. Quiero pedir justicia. Quiero encontrar a esos dos que arruinaron desde ese día la inocencia de estos nenes”, relató la mujer. La denuncia se realizó frente las autoridades de la Comisaría 4ta.
