Juliana Awada dio una nueva muestra de su perfil solidario. La mujer del presidente Mauricio Macri, acudió a la provincia de Catamarca para visitar el Centro de Desarrollo Infantil (CDI) de “Casa Cuna” y el comedor comunitario “San Nicolás”.
La Primera Dama recorrió ambos recintos, donde pudo compartir diversos momentos de calidez tanto junto a los niños de los centros como a los docentes y a los familiares. En esta enriquecedora experiencia, estuvo presente la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley.
La primera visita del programa fue en el CDI de “Casa Cuna”, donde asisten diariamente un total de 84 niñas y niños de 45 días hasta 3 años de edad. El establecimiento cuenta con un equipo formado, entre otros, por una trabajadora social, una psicopedagoga y un nutricionista.
Allí, Awada conoció cómo es el día a día de los niños y se enteró al detalle de las actividades de contención ofrecidas por el centro comunitario. En todo momento se la vio muy cercana a los más pequeños y muy atenta ante cada apreciación de los responsables de la entidad.
La segunda cita de la primera dama fue al comedor comunitario “San Nicolás”, que proporciona desayuno y merienda a niños del sur de la capital, San Fernando del Valle de Catamarca. Allí,acuden niños de entre 6 y 12 años y se organizan diversos tipos de talleres, que buscan estimular la creatividad de los más pequeños.
Como es ya habitual, Awada se guardó algunas de las fotos retratadas de su visita para su colección personal, mientras que también subió algunas de las imágenes en su cuenta de Instagram.
A principio de mes. la empresaria visitó el pueblito Monte Quemado, en Santiago del Estero, para ser testigo del trabajo de la fundación Haciendo Camino, entidad con la que ella colabora desde hace años. “Fue muy lindo venir y estoy agradecida por el cariño con el que me trataron los chicos”, aseguraría luego.
La fundación, liderada por Catalina Hornos, cuenta con diez centros especializados en la ayuda a niños y madres en situación de vulnerabilidad alrededor de todo el país.
La primera dama también había demostrado un gesto solidario con Catamarca a finales de marzo ante la visita al país de la familia Obama. En aquella ocasión, decidió regalarle a su par de Estados Unidos, Michelle Obama, una manta de vicuña fabricada por la asociación Hilanderas y Tejedoras de Vicuña “Belén, Cuna del Poncho”, de la localidad de Belén. “Yo no sabía que el poncho que yo estaba fabricando se lo iban a regalar a ella. Me quedé sin palabras”, aseguró en su momento Antonia Purificación Gutiérrez, la encargada de la confección de la prenda.
