De gira por Japón, Justin Bieber vivió un momento incómodo en las redes sociales. Cansado de que cada vez que comparte una foto con su nueva novia, Sofia Richie, le llega una lluvia de críticas por parte de sus admiradores, el cantante mandó una advertencia: “Voy a poner mi cuenta de Instagram como ‘privado’ si no paran con el odio”. Y agregó: “Si son realmente fans míos, no deberían ser tan malos con las personas que quiero”.
Enseguida, se impusieron los hashtags #RespectJustinAndSofia (Respeten a Justin y Sofia) y #BeliebersStayForever (Los beliebers nos quedamos para siempre) para defenderlo. Lo cierto es que después de separarse de Selena Gomez, ninguna de las parejas siguientes que tuvo fue muy aceptada por sus fans. ¿Le harán caso ahora?
