Desaparecieron las planillas de entrada y salida de personas de la Quinta de Olivos entre los días 15 y 19 de enero del 2015. Son las jornadas previas y posteriores a la muerte Alberto Nisman, el exfiscal de la AMIA, que ocurrió el 18 de enero de ese año.
Se trata de los días en los que Cristina Kirchner, con la ayuda de la AFI, la AFIP y la UFI, preparó su contraataque contra el letrado, que días antes la había denunciado de encubrir a imputados iraníes acusados del ataque terrorista de 1994.
Según publicó Clarín, un pedido de acceso a la información pública presentada por Poder Ciudadano reveló los faltantes de las hojas correspondientes a los días 15, 16, 17 y 18. Sería una maniobra para ocultar quiénes entraron estuvieron en la residencia presidencial antes de que Nisman apareciera con un balazo en la cabeza en su departamento de las torres Le Parc.
“El documento salta al 19, como si la Agrupación Seguridad e Inteligencia de la Presidencia esos días no hubiera anotado nada”, escribió el periodista Daniel Santoro. Los datos son clave para investigar esta muerte. Y el borrado o la rotura ocurrió antes del cambio de gobierno el pasado 10 de diciembre.
MOVIMIENTOS LLAMATIVOS
Los registros aparecen otra vez el día 18, con el nombre de Ricardo Echegaray y el secretario de Justicia, Julián Álvarez. También quedó asentado el ingreso de Camilo Vaca Narvaja, el entonces novio de Florencia Kirchner.
El 21 de enero, Echegaray llegó a las 23.30 y luego el secretario de Seguridad, Sergio Berni, a las 0.10. El 22 las visitas fueron de Parrilli, Aníbal Fernández, Florencio Randazzo, otra vez Echegaray y Rudy Ulloa. Los días siguientes se repitieron. Los que más estuvieron allí fueron Parrilli, Juan Martín Mena y el diputado Andrés “Cuervo” Larroque.
