El efecto de postear fotos de tu bebé

Si compartes a menudo fotografías de tu bebé en las redes sociales, tu subconsciente tiene algo que decirte.

No contar con las redes sociales es algo impensable a día de hoy, ya que compartimos constantemente fotografías y pensamientos con todos nuestros conocidos e, incluso, desconocidos. Pero el hecho de subir fotografías de nuestro hijo dice mucho de nosotras como madres, especialmente si somos primerizas. Te contamos el efecto que tiene para las madres postear fotos de su bebé.

Nuestro comportamiento exterioriza todo tipo de sentimientos internos, algunos de ellos inconscientes. Un grupo de investigadores de la Universidad Estatal de Ohio se ha interesado especialmente por el uso que dan las madres a redes sociales tales como Facebook, y su estudio ha determinado que la forma en la que postean fotografías de sus hijos dice mucho de su estado psicológico, especialmente si hablamos de madres primerizas.

Según la investigación, aquellas mujeres que postean con mayor frecuencia las fotografías de sus hijos o escritos relacionados con ellos tienden a sentir que deben ser madres perfectas. Es por esta razón por la que no dejan de subir fotos continuamente, ya que quieren mostrar al mundo el buen trabajo que han realizado y lo felices que son sus hijos.
Por supuesto, esto no lo hacen únicamente para compartir fotografías, sino para que el resto de personas interactúen con ellas y les confirmen que, efectivamente, son unas madres estupendas. Su reacción es mucho más intensa que la de otras personas cuando reciben likes o comentarios sobre ellas o sobre su bebé, probablemente por sentir una inyección de autorrealización al conseguir la opinión favorecedora de otra persona.
No obstante, también se da el caso contrario.

Una de las responsables de la investigación aseguró que “si una madre postea en Facebook para recibir confirmación de que está haciendo un buen trabajo y no recibe todos los likes y comentarios positivos que espera, podría ser un problema. Podría terminar sintiéndose peor”. Es decir, el hecho de que no contesten o envíen un comentario en el que se les diga algo distinto a lo que esperaban, estas madres tienden a sentirse desdichadas. Ya sea por la presión ejercida sobre ellas mismas o por no recibir el feedback esperado, lo cierto es que estas madres tienden a sufrir síntomas depresivos. Con esto también se confirma que ser madre sigue siendo algo que valida a una mujer como tal.

Está claro que estas afirmaciones no son decisivas y es necesario analizar el caso en concreto, pero una de las conclusiones más claras es que las madres primerizas son las que más suelen sentir esta presión auto ejercida por ser las madres perfectas, por lo que hay que llevar cuidado y no caer en la trampa de las redes sociales.