Unos 300.000 mochileros argentinos viajan cada año por el mundo

Unos 300.000 argentinos eligen todos los años cargar su mochila y recorrer el mundo en una experiencia que consideran enriquecedora porque "conectan con los lugares y la gente de otra forma" con un espíritu aventurero que les confiere no pensar en los posibles peligros que existen, a la vez que generan comunidades solidarias por lo que nunca viajan solos.

“Todos los años viajan por el mundo unos 300.000 argentinos, quienes reúnen la mayor parte de la audiencia hispanoparlante de mochileros, seguida de cerca por los colombianos”, dijo a Télam Nelson, miembro y referente de la organización Mochileros.org, una de los principales sitios que reúnen a gente que desarrolla estas actividades.
Nelson, quien también es mochilero, consideró que los avisos de personas que viajan por el mundo y permanecen extraviadas “son tan comunes que no llaman la atención ya que por lo general esas personas no quieren ser ubicadas o bien son falsas alarmas de parte de gente que esta preocupada al no saber nada del viajero en cuestión, pero usualmente esos casos se resuelven”
Irse de viaje con una mochila al hombro para conocer el mundo conlleva algunos riesgos, aunque Nelson aclaró que “no existe ningún listado de sitios a no visitar” y subrayó que “no hay ningún alerta especial para un viajero, ya que se deben tomar los mismos recaudos que toma cualquier persona cuando sale a caminar por la calle”.
“Cada ciudad tiene sus propios códigos, lugares peligrosos o lugares seguros. El buen juicio, la prevención y andar alertas son normas básicas en cualquier circunstancia para saber cómo moverse”, enfatizó.
El mochilero destacó, además, que hay decenas de casos de extravíos de mochileros pero ninguno se hizo tan viral como el de las dos chicas que finalmente murieron en Montañita, Ecuador.
Delfina, de 23 años, es una argentina que elige viajar con la mochila al hombro. Primero viajó por el norte del país y como la experiencia le gustó decidió repetirla y conocer países vecinos.
“Elegí salir de mochilera primero porque es una de las formas más económicas de recorrer lugares que de otra forma no podría. Además, aprovechás a conectar mucho más con el lugar que estás visitando y conocés de otra forma, caminás las ciudades, conocés mucha gente”, explicó a Télam desde Lima, Perú, último tramo de un viaje que incluyó paradas en Montañita, Baños de Agua Santa y Cuenca, en Ecuador.
La joven comentó que “la comunidad que se arma con otros mochileros es muy linda, es un ambiente muy solidario y nunca viajás solo, siempre encontrás alguien para compartir ruta aunque sea por unos días”.
Delfina, que estuvo en Montañita y ya había pasado unos 20 días en Ecuador cuando se conoció el crimen de las jóvenes mendocinas, aseguró que no se siente más expuesta cuando viaja”.
Consultada sobre los tips de seguridad que implementa a la hora de viajar, la joven señaló que no hace “nada distinto” a lo que hace cuando está en su casa.
“En realidad ante los riesgos no hago nada distinto a lo que hago en mi casa: siempre tengo cuidado de dónde entro y escucho consejos de la gente que vive en el lugar sobre las zonas peligrosas, pero considero que viajar implica los mismos riesgos que vivir en cualquier lado y que uno siempre está expuesto a que pasen cosas”, destacó.
El Foro de Mochileros aconsejó a los que sufren contratiempos en los viajes como perder su equipaje, no encontrar hospedaje en los lugares a los que llegan, perder los documentos, enfermarse de gravedad o si el vuelo se retrasa tener “una postura mental positiva”.
“Las indignaciones, revanchas, broncas y venganzas solo te van a mantener dentro de un agujero. Sal de él cuanto antes. Lo mejor es siempre concentrarse en las soluciones no en el problema y sobre todo recuperar el equilibrio para disfrutar el viaje”, destaca el Foro.