El joven de 1,80 metros se había subido en la estación de Milán, Italia, escondido en la pequeña valija de un amigo. Pero luego de 45 minutos de viaje no aguantó más y comenzó a gemir. Los pasajeros, asustados, alertaron a los guardas que bajaron el equipaje al andén en la estación de Chiasso, pocos kilómetros después de la frontera. La policía local filmó el momento en que abrió la maleta y emergió su ocupante.
“Habíamos visto gente tratando de pasar en el baúl de un automóvil, pero esta es la primera vez que encontramos a alguien en una valija”, contó Mirco Ricci, un oficial de fronteras suizo en la región de Ticino, que contó que el joven fue devuelto a Italia.
Las autoridades migratorias suizas han visto un rápido aumento de migrantes africanos (sobre todo eritreos, somalíes y negerianos) que tratan de ingresar al país. Unos 3.400 han sido arrestados desde el 30 de mayo pasado.
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