Se divorcian para que uno de ellos pueda casarse con la novia bisexual que comparten

Cuando Cristina y Benno se juraron amor eterno, nunca imaginaron que otra mujer acabaría con su matrimonio. Pero doce años más tarde, los padres de tres niños han comenzado su trámite de divorcio para que la novia que ambos comparten no se sienta apartada.
Cristina y Benno Kaiser, de Austin, Texas, son padres de tres niños: Isaiah, Rebecca y Brianna, quienes hoy día pasan gran parte del día con Sierra Kuntz, la nueva “madre” de la casa, que se dedica a tiempo completo a ellos y quien —en el corto plazo— tendrá derechos legales sobre los pequeños, al casarse formalmente con uno de sus padres recientemente divorciados.
Los protagonistas de la historia se conocieron hace doce años, mientras ambos servían en la Policía Militar del estado de Virginia. Se casaron a los cuatro meses de conocerse y al año tuvieron a su primer hijo, Isaiah. Con el tiempo Cristina, quien se declara bisexual, comenzó a sentir que le faltaba algo en su vida amorosa.

La pareja abrió su matrimonio luego de que Cristina admitiera que faltaba algo en su relación. Afortunadamente para ella, Benno estuvo interesado en la idea y luego de un par de intentos fallidos con mujeres que no resultaron, la pareja finalmente conoció a Sierra en un centro comercial.
“Una hermosa mujer se me acercó a pedirme el número y a su lado estaba su marido, entonces pensé que me metería en problemas. Al final me di cuenta de que era todo lo contrario”, comentó Sierra en entrevista con Barcroft TV.
“Cristina, Sierra y yo conectamos desde el primer momento. Tiempo después de nuestra primera cita, supimos que debíamos estar los tres juntos”, afirmó el patriarca de la familia símbolo de la tendencia en crecimiento del “poliamor”.
“Inicialmente le propuse a Benno abrir el matrimonio e incluir a otra mujer, para probar cómo nos sentiríamos”, comentó la madre de tres. “Hoy tenemos tres hijos y una hermosa relación. El hecho de haber sumado a Sierra ha hecho que nuestra vida mejore notablemente, ahora me siento completa”.
Los Kuntz aseguran que los beneficios del matrimonio con la joven de solo 21 años serán mucho más que legales, dado que representa una prueba de que su amor por ella no es algo temporal. “Ambos la amamos y esto es algo para toda la vida”, afirmó Benno.

El padre de la familia, un asistente legal de 37 años, asegura que la decisión fue tomada para que Sierra entendiera la profundidad del amor que tanto él como su esposa sienten por ella y las intenciones que tienen de que sea parte de su núcleo familiar.
“Hablamos con nuestros hijos sobre nuestra intención de adoptar a alguien y sumarla a nuestra familia. Ellos nos apoyaron y lo entendieron”, aseguró Benno.
Los beneficios del “poliamor” aparentemente se extienden al dormitorio de esta relación de tres. “No ha pasado un sola noche en la que no hayamos tenido algún tipo de relación íntima. Todos nos involucramos en el momento”, compartió el hombre que tendrá, de ahora en más, a su ex esposa y a su flamante mujer bajo un mismo techo y en el mismo lecho.

Luego de renunciar a su trabajo en una tienda de mascotas exóticas, Sierra se dedica a tiempo completo a los tres niños de la pareja. “Les damos tres veces el amor y el apoyo que un padre les puede dar. Sus maestras incluso comentan lo felices que están”.
“Tengo dos mamás, que me ayudan con la tarea y que me aman. Mis amigos piensan que es raro, no entienden cómo mamá permite que haya otra mamá en casa; simplemente no lo entienden”, compartió con total naturalidad Isaiah, el hijo mayor de los Kaiser.
Benno asegura que su estilo de vida no es para todo el mundo y que entiende que existen muchas personas que son felices en una pareja monógama tradicional. “Somos todos diferentes, pero antes de juzgar debemos mirar nuestra vida y considerar los beneficios. Yo no imagino mi vida de otra manera”.

Fuente: ENACTUALIDAD.COM