Pérez Corradi, el preso más cuidado: no le dan comida si alguien no la prueba antes

Está monitoreado en todo momento. Duerme en un pequeño calabozo, con cama de cemento.

El operativo de seguridad por Ibar Pérez Corradi es tal que el Gobierno dispuso que el presunto autor intelectual del triple crimen no fuera trasladado a Comodoro Py para declarar y permaneciera en el edificio Centinela de Gendarmería. El propio detenido reconoció que teme por su seguridad y dijo que hay contratos para atentar contra su vida.

Patricia Bullrich ordenó extremar las medidas de seguridad por el detenido, recientemente extraditado de Paraguay. El abogado de Pérez Corradi, Carlos Broitman, le dijo a TN que cuando estaban por llevarlo a tribunales federales recibieron una alerta de inteligencia, por lo que finalmente suspendieron el traslado.

Finalmente el empresario farmacéutico declaró ante la jueza federal María Servini de Cubría en el Edificio Centinela. Permanecerá allí hasta que la magistrada y el Ministerio de Seguridad de la Nación lo decidan.

Pérez Corradi está alojado en un pequeño calabozo, con cama de cemento y un colchón delgado de material ignífugo, que no puede prenderse fuego. Está custodiado en todo momento y no se le da la comida si no fue probada antes. Allí se reencontró después de cuatro años prófugo con su exmujer Liliana Aurehhuliu y sus hijos y se quebró en lágrimas.

Por razones de seguridad hicieron pasar a un gendarme como Pérez Corradi.

El operativo de seguridad por Pérez Corradi incluyó a un doble, en la llegada del detenido a la Argentina luego de que lo extraditaran de Paraguay. Se vio que del avión de la Fuerza Aérea Argentina bajaba un hombre de buzo gris claro, jeans y zapatillas deportivas.

Todo hacía pensar que se trataba del empresario farmacéutico pero en realidad era un gendarme camuflado como el detenido. Desde el Ministerio de Seguridad le dijeron a TN.com.ar que Pérez Corradi estaba vestido con ropa de gendarmería y que esta es una medida muy común en equipos de alta operatividad.