La Universidad de Londres publicó un estudio por medio del que se descubrió que el amor romántico y el amor maternal producen un efecto similar en el cerebro. La única diferencia entre uno y otro es que el amor romántico activa el hipotálamo, sector que se encarga de la excitación.
La investigación determinó que la actividad asociada a la crítica social de otras personas y las emociones negativas se suprimen. De esta forma es que las personas enamoradas no escuchan lo que los demás tienen para decirle de su pareja y son incapaces de criticar o decir algo malo de su amor.
Durante la investigación escanearon más de 20 cerebros expuestos al amor maternal y al amor romántico y vieron que las reacciones son similares.
La respuesta es euforia
La sección que se encuentra mayoritariamente estimulada es la del “sistema de recompensa” y tal como sucede cuando ganamos mucho dinero, el sentimiento que se genera es la euforia.
Nuestro cerebro libera dopamina y oxitocina, lo que causa el sentimiento de placer. El amor es un sentimiento que genera placer y felicidad y es por esto que nuestro cerebro quiere que esa sensación se mantenga. El cerebro trabajará en pos de sentir el amor, lo que es bueno para la perpetuación de nuestra especie según el investigador principal Bartels.
Por otra parte, se descubrió en estas personas bajos niveles en cuanto a la actividad relacionada con los juicios negativos. Es por esto que idealizamos y adoramos a nuestra pareja incluso cuando tiene actitudes repudiadas por los demás.
Este estudio permite concluir que el amor humano es de los más fuertes que existe debido a esta característica, porque supera cosas como la distancia social, elemento que ninguna otra especie posee.
Así que la próxima vez que te digan que el amor es ciego tendrás que decir que tienen razón. ¿Qué te parece?
¿Será bueno o malo? El amor es ciego: estar enamorados nos impide apreciar la belleza del resto.
