María Eugenia Vidal: “Nadie puede llamarse trabajador de la Provincia e intentar incendiar la puerta de la Legislatura”

La gobernadora bonaerense repudió los destrozos provocados por gremialistas durante el debate de la Emergencia Administrativa, que fue sancionada por la Cámara de Diputados: "Lamento mucho lo que pasó"

La Legislatura bonaerense volvió a ser escenario de conflicto y escándalo este jueves durante la sesión que trataba la Emergencia Administrativa. Dentro del recinto, legisladores del kirchnerismo insultaron al oficialismo por avanzar con la medida. Hubo gritos y empujones. Afuera del edificio, la situación fue incluso peor.

Representantes de distintos gremios ligados al Estado provincial marcharon con consignas de repudio a la ley que impulsaba María Eugenia Vidal. Pero la manifestación no quedó allí. En medio de la tensión, hubo grupos que incendiaron cubiertas en la puerta de la Legislatura, rompieron vidrios y provocaron todo tipo de destrozos. La gobernadora no se quedó callada.

“Lamento lo que pasó hoy”, dijo al ser consultada al respecto en una conferencia de prensa tras una reunión con diputados. “Nadie puede llamarse trabajador de la Provincia e intentar incendiar la puerta de la Legislatura”, añadió.

También recordó que “el 92% de los trabajadores acordó paritarias y estuvieron de acuerdo con la propuesta que hicimos” por lo que expresó: “Lamento profundamente lo que pasó. Conozco y trabajo con los trabajadores del gobierno provincial todos los días”.

Otro de los repudios de la gobernadora fue que la intención de los manifestantes era impedir una votación: “Ahí adentro había un debate que había cumplido las normas. El proyecto se había tratado en comisión, se habían cumplido los pasos y los diputados tenían derecho a votar. Por suerte se pudo y hoy es ley”.

Asimismo, aseguró que “nadie se va a haber afectado” y argumentó: “Estamos pidiendo una herramienta para comprar chalecos en menos de seis meses. La ley hace reducir los plazos de compra de bienes y de licitación de obras importantes y no reduce ningún tipo de control ni elimina ninguno de los que había. Solo establece tiempos más cortos para expedirse”.

Al respecto, ejemplificó: “La obra de la cuenca del Luján recién iba a poder ser adjudicada en marzo del año que viene. Ahora con la nueva ley vamos a poder achicar ese tiempo y si todo sale bien ya tenemos financiamiento internacional para que la obra comience antes de que termine el año”.