Loca obsesión: El hombre de las dos mil Barbies

Fanático de la muñeca más sexy del mundo, tiene las paredes de su dormitorio repletas de rubias. Desde ejemplares valuados en miles de dólares hasta otras súper antiguas, accesorios, casas, autos y Kens completan su loca obsesión.

El estadounidense Stanley Colorite (41) se llama a sí mismo “El Hombre Barbie”. ¿Por qué? Porque, créase o no, colecciona las famosas muñecas desde hace dos décadas y transformó su casa en un museo del popular juguete de la firma Mattel.

El hombre vive en el estado de La Florida y su colección es de alrededor de 2.000 muñecas, algunas de las cuales valen mucho dinero y fueron los primeros ejemplares en lanzarse al mercado. Entre ellas, se destaca en la estantería, una del año 1962, la sexta que apareció en el mundo. Su afán (¿pasión?) lo lleva a gastar más de 30 mil dólares al año en sus juguetes.

Stanley tiene los muros de su dormitorio repletos de diferentes Barbies, con infinidad de atuendos y accesorios. Admite que su hobbie se transformó en obsesión y que no puede parar de coleccionarlas. Cada mes suma 20 muñecas a su impresionante muestrario, así como otros objetos relacionados. Actualmente, su colección esta valuada en 80 mil dólares.

Historia de una debilidad

Todo comenzó en 1997, cuando Colorite comenzó a adquirirlas en jugueterías, sitios de compras on line, ventas de garaje y mercados de pulgas. Entre ellas están las que fueron lanzadas con los trajes de heroínas del cine como Gatubela, la Mujer Maravilla y Tormenta; otras caracterizan a personajes como la princesa Leia, de Star Wars, y las clásicas Barbies con diferentes atuendos, desde los más casuales hasta los trajes de reina de belleza.

Para exponerlas al mundo y a sus amigos, confeccionó una vitrina especial para que luzcan sus particularidades. El primer puesto lo tiene una muñeca que viste un traje de baño rojo estilo vintage valuada en 700 dólares. Además, tiene 1000 muñecos Ken y cientos de accesorios confeccionados por diseñadores exclusivos, incluido uno realizado por el destacado Oscar de la Renta.

También colecciona los autos deportivos a escala, como un Corvete, casas de muñeca, un “baño de los sueños” y hasta aviones que la compañía Mattel ha lanzado a lo largo de décadas de venta.

Stanley asegura que esto se trata de una adicción, a la que no puede dejar. Hace ya 16 años que esta armando esta gran colección… Y asegura que va por más.