La línea para denunciar inmigrantes abierta por Trump se llena de gente intentando deportar a sus suegras

No sólo suegras/os. La línea abierta se ha convertido en un espacio de quejas y peticiones de deportaciones de lo más surrealista. Una serie de registros internos de las llamadas obtenidas por el medio Splinter demuestran que la gente ha tomado la línea para asuntos (muy) personales.

En el mes de abril la Administración Trump lanzó VOICE, una línea telefónica y oficina “para las víctima de crímenes de inmigrantes”. Según explicó el mismo Trump en el momento del anuncio, con ello se intentaba “dar voz a aquellos ignorados por medios de comunicación y silenciados por grupos de interés”.

Obviamente, el mensaje fue ampliamente criticado por gran parte de la población, ya que se veía como una iniciativa de gran carga nacionalista donde Trump y su gobierno volvían a incidir sobre los inmigrantes en el país.

Pues bien, han pasado cinco meses desde entonces, y el balance de la iniciativa no ha podido ser mas incongruente. Splinter ha tenido acceso a muchos de los registros internos telefónicos, evidencias de que cientos de estadounidenses se han apoderado de VOICE para presentar acusaciones secretas contra conocidos, desde vecinos hasta miembros de familia, denuncias que en la mayoría de los casos trataban de deportar a la otra persona.

Los registros provienen de la propia página web de Inmigración y Aduanas, y rara vez se habla del sentido original de VOICE, esa “criminalidad peligrosa” de la que hablaba Trump. En cambio, se ha convertido en un foro para resolver las rencillas personales. Veamos algunos ejemplos muy gráficos.

El 25 de mayo de este año, un hombre llamó para decir que su hijastro estaba violando una orden de restricción al estacionar su coche cerca de su casa. El hombre no quería que su esposa supiera que estaba intentando que su hijo fuera deportado. Según el informe de VOICE:

La persona que llamó declaró que el extranjero ilegal (su hijastro) era un drogadicto sin empleo. Dijo que era un vagabundo que vivía en el coche aparcado en una dirección que suministró.

La persona que llamó declaró que es un peligro para la sociedad y quería saber por qué no está bajo custodia después de que el sujeto desapareciera recientemente de su audiencia judicial (con número y fecha redactada) y ahora estaba violando la libertad condicional. La persona que llamó ha proporcionado un número y nombre del sujeto.

Sin embargo, hay otras quejas mucho más difíciles de catalogar. Splinter resume algunas de las llamadas más surrealistas que se han dado desde la creación de VOICE:

La persona que llamó informó sobre su suegra y su cuñada, indicando que habían entrado en el país como turistas y permanecían en Estados Unidos para conseguir su estatus legal.

 

La persona que llamó declaró que un indocumentado está destruyendo a su familia y está cometiendo adulterio.

 

La persona que llamó informó que su ex esposa es una indocumentada que se había quedado sin su visa.

 

La persona que llamó informó de un extranjero ilegal porque este no le permitía ver a su nieta.

 

Como cuenta el medio, hay muchísimas más. En realidad, cientos de llamadas donde el informe no se acerca ni remotamente al origen de la iniciativa. Personas que llaman para advertir de matrimonios de conveniencia, otras porque se va a celebrar un divorcio y ofrecen la fecha de la audiencia para que deporten a la otra persona, o incluso denuncias falsas de malos tratos.

Escriben en Gizmodo que en definitiva, si la iniciativa VOICE ya había nacido bajo la sospecha de un esfuerzo por enfundar miedo a la inmigración, el paso del tiempo parece haberla convertido en una caricatura de muy mal gusto, una con lo peor del ser humano.