En la localidad de Garupá, en uno de los controles en conjunto que se realizan con la Policía de Tránsito de la Provincia, sobre la ruta provincial 105, se detectó lo que nadie imaginó o sospechó.
Según el propio intendente de la localidad que integra el área metropolitana del departamento capital, Luis Ripoll, “tuvimos que pedirle al conductor que nos responda de manera sincera en dónde había hecho su verificación…, porque la que presentó no tenía aval alguno”.
“Y nos dijo sí que él tenía su auto desarmado y que cuando lo tenía listo, se presentó en su propia casa un hombre con el aval de certificarle la verificación técnica de su auto, pero claro, sin pasar por ningún test y encima le cobró mucho más caro del valor real”, detalló el intendente de Garupá a El Territorio.
“Le cobró 1.200 pesos cuando si lo hacía en un taller habilitado, lo hubiera pagado 400. Nos extraña que una persona grande no sepa que tiene que ir a lugares habilitados. En Garupá sólo hay para vehículos de transporte; el resto de los vecinos tienen que ir a Posadas (al Zaimán o al ubicado por la avenida Alicia Moreau de Justo casi Quaranta)”, dijo Ripoll.
De acuerdo a lo indicado, el hombre entrega los documentos a nombre de otra persona que sí tendría un taller habilitado en la localidad de San José.
“Es un ingeniero, o supuesto, pero nunca nos dijo el conductor quién es o en dónde vive, estamos investigando”, precisó el intendente.
