La vicepresidente Gabriela Michetti se quejó antes de abrir las 136° sesiones ordinarias en el Congreso porque los legisladores no le hacían caso y no se dio cuenta que salía en la transmisión oficial.
Tras algunos pedidos a los legisladores para que tomen asiento, la presidenta del Senado protagonizó una insólita perlita al pedirle ayuda Emilio Monzó, el presidente de la Cámara de Diputados: “Ayudame, boludo. No me dan pelota”.