El ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, admitió ayer que “va a faltar manteca” en las góndolas de los supermercados y justificó esa medida: “Hay decisiones empresariales de hacer queso porque permite más margen de rentabilidad”.
Sus dichos generaron repercusiones en las redes sociales y en algunas entidades de productores, que salieron a cuestionar la no intervención del gobierno nacional para garantizar el abastecimiento de uno de los alimentos preferidos de los argentinos para el desayuno.
“A veces le tenemos miedo a la palabra intervención, pero el Gobierno debería reunir a toda la cadena láctea y ver cómo se encara esta situación, que no es un problema nuevo. Lamentablemente parecería que no se quiere tomar cartas en el asunto”, se quejó, Jorge Chemes, vicepresidente de CRA.
Sin embargo, Alejandro Sammartino subsecretario de Lechería de la Nación, ratificó la decisión de no intervenir en el mercado. “Nosotros trabajamos con todos los mecanismos legales; hoy no existe una intervención directa, no podemos obligar a una industria a cambiar el destino de su producción”, explicó el funcionario en un reportaje con Luis Novaresio en radio La Red.
Sammartino justificó la elección de la industria y según resumió hay tres factores que afectan la cadena: la caída de la producción en la cuenca lechera de Santa Fe y Córdoba como consecuencia de las inundaciones; una cuestión estacional –la producción de leche no es constante durante todo el año–; y el aumento de su consumo en los meses estivales. “Con el invierno las amas de usan más manteca en la cocina”, afirmó.
Los argentinos consumen unos 5 kg de manteca por año. Según el funcionario “hay un efecto simbólico de no ver manteca en la góndola que es preocupante” pero fue el único producto que faltó entre los lácteos de primera necesidad. “Sería más preocupantes que no hubiera leche y la lecha estuvo asegurada siempre”, enfatizó.
¿Cuánto debería ser el precio razonable de la manteca?
“Es difícil decirlo”, admitió Sammartino y señaló que la manteca a tenido una evolución mucho menor que otros lácteos. “De marzo a junio el aumento fue de apenas el 4%; los quesos subieron un poquito más”.
Para el funcionario un precio razonable en los supermercados “debería ser 23 o 24 pesos” el pan de 200 gramos. Y recordó que “existe un acuerdo (Precios Cuidados) con la industria para que el consumidor pueda acceder a productos de primera necesidad a precios más razonables y eso se está cumpliendo”.
Para finalizar, Sammartino aseguró que de acuerdo a sus monitoreos “desde marzo la producción está subiendo estacionalmente” y “la próxima semana se va a retomar al abastecimiento normal de manteca”.
“Esto es gradual; algunas industrias van a estar reponiendo manteca la semana próxima y otras va a tardar algunas semanas más. Hay un aumento de la producción de entre 5 y 7% por mes y eso nos dictamina que se está recuperando la cadena”, concluyó.
