La revancha que jugarán River y Racing por los octavos de final de la Copa Libertadores quedó en el medio de un escándalo: Bruno Zuculini, que ingresó en el segundo tiempo en el Millonario, acarreaba una suspensión de dos fechas desde el 2013 que no cumplió en toda la edición actual.
Así, con los antecedentes de Temuco y la situación de Santos con Independiente, el Millonario quedó expuesto y se generó una ola de polémicas.
Pero más allá de eso, tanto River como Racing buscarán esta tarde -a partir de las 19.30- el pasaje a los cuartos de final del certamen, tras el 0-0 de la ida.
El conjunto del Muñeco Gallardo atraviesa una etapa complicada en cuanto a su efectividad y lleva cuatro partidos sin convertir entre Libertadores y la Superliga. La contracara es Franco Armani, que alcanzó un récord de 890 minutos con la valla invicta y que pretende agigantar esa marca.
Diferente es la situación de la Academia, que marcó en todos sus partidos, salvo ante el Millonario en la ida del cruce copero.
“Dormimos todos”
“Yo no sabía y nadie sabía lo de Zuculini, así que dormimos todos. Así y todo, yo me sentiría incompleto si ganara al reclamar algo así. A mí me gusta jugar y ganar en la cancha. Sé que para los hinchas un 3-0 es mejor, pero si tengo que elegir me gustaría pasar jugando en vez de asegurarlo por otro tema. Es mi pensamiento”, aseguró el Chacho Coudet en la previa del encuentro.
“Me mantuve al margen del fallo de la Conmebol y sólo pienso en hacer lo mejor en una cancha difícil”, agregó el entrenador de la Academia.
Alejandro Donatti finalmente estará en el banco, ya que no llegó en las mejores condiciones a la revancha.
