viernes 19 abril, 2024

Comienza el plan del Gobierno para controlar a los barras

La ministra de seguridad Patricia Bullrich anunció el proyecto “Tribuna Segura”, que obligará a los simpatizantes a tener que concurrir con el documento. Iniciará esta fecha, en tres encuentros

Tras el intento fallido de utilizar el AFA Plus, el actual Gobierno decidió lanzar un nuevo plan para intentar erradicar la violencia en los estadios del fútbol argentino. El proyecto se llama Tribuna Segura, el cual cambiará el ingreso a las canchas.

Toda persona que desee concurrir a un encuentro deberá llevar consigo su Documento Nacional de Identidad, para que los efectivos policiales lo escaneen con un celular y así puedan conocer al instante si la persona tiene pedido de captura o derecho de admisión.

Los dirigentes eran extorsionados por los barras. Ahora van a tener que venir al Ministerio de Seguridad. El control lo pone el Estado, no el club”, señaló la ministra de Seguridad Patricia Bullrich el pasado martes, durante la presentación de este nuevo plan. Una de las diferencias con el anterior sistema es que antes sólo se identificaba a aquellos que tenían prohibido su ingreso debido a figurar en las listas que confeccionaban los propios clubes.

Su estreno será este fin de semana (la segunda fecha del campeonato), en tres encuentros que se disputarán en Capital, debido a que el sistema por ahora regirá en la Ciudad de Buenos Aires y lentamente se irá implementando en el resto del país. Esta noche se usará en Huracán-Quilmes, pero también el domingo en Vélez-Rosario Central y Boca-Belgrano.

El nuevo método, que tendrá la base de datos de todos los argentinos, está pensado para ser utilizado en celulares con sistema operativo Android. “El objetivo es que no haya más barras bravas. No queremos ver más la imagen de efectivos custodiando a los violentos“, señaló la funcionaria.

Si un hincha es detenido por portar un arma de guerra o un artefacto explosivo durante los controles, podría recibir una pena de 2 a 6 años de prisión. La intención del Gobierno es que en un futuro dentro de los estadios solamente haya seguridad privada, y que la Policía se ocupe de las adyacencias.