El cazador, identificado como José Antonio Monzálvez, de 46 años y que vivía en Neuquén , murió el sábado pasado por la tarde en una reserva privada 70 kilómetros al noroeste de la pequeña localidad de Kalkfeld, según la Namibia Press Agency.
Monzálvez, que trabajaba para una compañía petrolera, estaba con otro compatriota y tres personas de Namibia cuando murió. Uno de los elefantes cargó contra el grupo antes de que pudieran encontrar un lugar para apuntar y disparar.
El fallecido portaba un permiso de caza, indicó el reporte, señalando que los familiares habían sido informados de su muerte.
