Amado Boudou deberá declarar nuevamente… Esta vez por viáticos truchos

Tendrá que presentarse el 30 de octubre ante el juez Ariel Lijo. Detectaron facturas apócrifas y gastos por encima de los costos reales.

Con el juicio por la compra de la Calcográfica Ciccone en marcha, Amado Boudou suma otro frente judicial. El juez Ariel Lijo lo llamó a declaración indagatoria para el 30 de octubre por el delito de defraudación a la administración pública por la “presentación de declaraciones juradas con datos falsos y comprobantes de pago apócrifos”.

Durante la investigación se confirmó la falsificación de facturas en la rendición de viáticos correspondientes a viajes al exterior realizado cuando era ministro de Economía por más de 15.000 euros. Además fueron citados Guido Forcieri ex jefe de Gabinete de Hacienda y su secretario privado Héctor “Cachi” Romano.

Facturas apócrifas, gastos sobrevaluados, son las principales inconsistencias que la Justicia detectó al peritar los gastos rendidas y tras enviar exhortos al exterior, se entrecruzó la información de costos de hotelería principalmente, para corroborar las cifras rendidas por Amado Boudou, Romano y Forcieri.

Con estas maniobras “se ​buscó obtener un beneficio económico directo mediante la defraudación efectuada en perjuicio de la administración pública”, consideró el magistrado en la citación a indagatoria.

La justicia detectó que hubo datos falsos en las declaraciones juradas de rendición de gastos de dos expedientes correspondientes al 2011 del Ministerio de Economía. “A sabiendas de la falsedad de los montos por gastos eventuales consignados, los cuales justificaron con comprobantes falsificados”, indica la resolución firmada por el juez Lijo.

Uno de los viajes realizados y bajo investigación, fue uno que tenía como destino final París entre lo días 17 y 21 de febrero de 2011. Según pudo corroborar el juzgado, hay facturas con gastos por encima de los costos reales y también se adjuntaron en las rendiciones “comprobantes apócrifos”, indicaron a Clarín fuentes judiciales.

Por un lado, se falsificaron dos facturas del hotel “Bel-Ami” por 9.395 y 6.943,23 euros respectivamente. Según los exhortos enviados a Francia, las cifras rendidas “no se ajustan con los costos reales”, indicaron fuentes de la causa a Clarín.

Ante la consulta del juzgado, personal del hotel informó que tanto el número de las factura como el huésped (“Ministerio de Economía argentino”) y las fechas de estadía “no concordaban con la información registrada en el hotel”. De esta forma Boudou y Romano omitieron restituir los nueve mil trescientos noventa y cinco euros asignados a este gasto.

En este punto, se incluyen los viáticos asignados a la comisión que realizó Forcieri en París el 15 y 28 de febrero de 2011. La declaración Jurada de Rendición de Viáticos presentada junto con Romano tenía un comprobante de pago Bel – Ami por más de 6.400 euros y “que habría sido falsificada”.

El hotel desconoció haber emitido dicha factura. Sin embargo, informó sobre otras fechas en las que Forcieri se alojó en el lugar “que no condicen con lo declarado” ya que el monto era por 883 euros.

Así, la Justicia consideró que tanto Forcieri como Romano conservaron el dinero asignado a dicha comisión: 6.439,23 euros “que debían restituir”.

Otro de los gastos apócrifos fue la factura emitida a favor del intérprete Eduardo E. Kannemann, por 3.300 euros, todo en el marco de la rendición de gastos de los expedientes investigados. Consultado por el juzgado, Kannemann admitió haber realizado la tarea consignada pero por una cifra inferior: 1.500 euros.

En este contexto, el juez Ariel Lijo fijó la indagatoria de Boudou para el lunes ​30 de octubre, teniendo en cuenta que desde ayer, durante los martes se realizarán las audiencias del juicio por la compra de la calcográfica Ciccone.

Además, deberán declarar el 31 de octubre quien fue secretario privado del ex ministro de Economía, Héctor Romano y el ex jefe de Gabinete del ministerio, Guido Forcieri (también procesado en la causa Ciccone) citado para el 1 de noviembre.

Por Lucía Salinas