Denuncian en Entre Ríos a un abogado por más de 2 mil casos de abuso sexual a adolescentes

Según las denuncias, Gustavo Rivas organizaba orgías con menores. Los filmaba y extorsionaba a las familias.

Todo el mundo sabe quién es en Gualeguaychú. Se trata de un personaje prestigioso, abogado y depositario de la memoria histórica del lugar. Fue incluso candidato a gobernador. Se llama Gustavo Rivas y ahora tiene 71 años. Este mediodía la Justicia allanó su casa por dos mil denuncias por abuso. Del lugar, ubicado a pocos metros de la Jefatura de Policía, los investigadores se llevaron una gran cantidad de casetes VHS con grabaciones de los hechos.

Algunos aseguran que sus excursiones en busca de adolescentes varones de 15 o 16 años por las calles de la ciudad empezaron a fines de los años ’60. Otros, las sitúan a principios de los ’70, cuando regresó de La Plata con su flamante diploma. Rivas organizaba reuniones con una heladera bien provista e invitaba a los jovencitos a la casona familiar o en otro sitio. Picadas, pizzas y bebidas solían correr en esas “reuniones”. Algunos de los invitados eran elegidos para subir con él a su dormitorio.

 

Según las denuncias, hubo sesiones de sexo en público: instaba a los chicos a masturbarse en ronda y los filmaba. Esas grabaciones, en Super 8 o en VHS, eran la garantía de que no iba a ser denunciado. Cuando a alguna de las víctimas se le “soltaba la lengua” o cuando algún padre, enterado de las perversiones a las que sometía a su hijo quería denunciarlo, decía: “Si él me quema, yo lo quemo”.

Viernes y sábados a partir de las 10 de la noche, los chicos desfilaban por su casa, a veces sin previo aviso. Se sabía que entre cinco y diez chicos podían pasar por su cama, y que los afortunados saldrían con algunos pesos, dinero o zapatillas. Y si la “relación” prosperaba, estaba dispuesto a pagar viajes de fin de curso a Bariloche, regalar una moto de alta cilindrada y hasta solventar estudios universitarios. Había pibes humildes, pero también hijos de sus amigos o relaciones sociales. Los atendía en bata, con nada debajo. Todo eso consta en el expediente.

Cómo se dio a conocer el caso

La investigación tardó dos años y fue encabezada por un equipo periodístico de la Revista Análisis. “Tardamos mucho tiempo porque las víctimas tenían miedo a denunciar”, contó a TN Daniel Enz, periodista a cargo del informe.

Rivas se valía de jóvenes humildes y los encuentros sexuales tenían como retribución dinero u objetos de valor. “A algunos les pagó el viaje a Bariloche”, explicó Enz en base a los testimonios de esos chicos que hoy son hombres.

En declaraciones a medios locales, el abogado negó los hechos, aunque su aclaración es insólita: “El 95% de los hechos son mentira”.

“Lo importante es que la Justicia abrió la causa y que hay personas que van a poder declarar”, dijo el periodista de Análisis. Los vecinos de Gualeguaychú están consternados y reclaman que el caso no quede impune.

Por Miriam Lewin